Si tu habitación sube de grados y no sabes por qué, el principal sospechoso es el PC. No obstante, interesa saber cuál es el componente que está causando esto, o si son varios los que están funcionando a una temperatura más elevada de lo normal. En cualquier caso, monitorizar las temperaturas del PC nunca es una mala idea por lo que, a continuación, te vamos a contar cuáles son las mejores aplicaciones para hacerlo.

Problemas del hardware con la temperatura

Como bien sabes, los componentes del PC (sea el procesador, la tarjeta gráfica, la memoria RAM, etc.) utilizan energía para funcionar, pero el uso que hacen de ella no tiene una eficiencia del 100%, lo que significa que que no utilizan toda la que consumen y, por lo tanto, todo el excedente se transforma en calor. Los componentes del PC no funcionan bien a altas temperaturas (e incluso pueden llegar a estropearse), y por ese motivo es siempre necesario mantener cierto nivel de refrigeración en el sistema.

¿Por qué esto es así? Pues como ya os hemos dicho, a altas temperaturas los componentes de hardware pueden llegar a estropearse, pero es que estos mismos suelen contar con sistemas de protección. Por ejemplo, un procesador o un SSD cuando alcanzan cierta temperatura comienzan a reducir su frecuencia de funcionamiento y, con ello, su rendimiento para proteger su integridad, de manera que cuantomás calor soporten más lento funcionarán.

Este es el motivo principal por el que siempre es bueno medir la temperatura de los componentes del PC, ya que así podrás saber si todo está funcionando correctamente y tomar las medidas necesarias en consecuencia. Por ejemplo, podrías notar que el PC funciona muy lento cuando le haces trabajar mucho y, al utilizar alguna de las aplicaciones que te vamos a recomendar a continuación, detectas que el calor está fuera de los límites recomendables. Sabiendo que el problema de rendimiento es por su culpa podrías optar por cambiar el disipador por uno mejor.

Aplicaciones para medir la temperatura de la CPU

Core Temp

Empezamos enfocándonos en nuestra CPU, un componente vital para el funcionamiento del sistema. Todos queremos que nuestro procesador dure eternamente, objetivo que alcanzaremos si lo cuidamos debidamente. Como consejo rápido, intentad que siempre esté fresco.

Para asegurarnos de que está funcionando en una temperatura correcta, encontramos Core Temp. Se trata de una aplicación ligera, sencilla e intuitiva que es capaz de mostrarnos el calor que sufre cada núcleo de la CPU, indicando su mínimo, máximo y la carga individual.

Afortunadamente se trata de un programa gratuito y sencillo de instalar. Lo podéis descargar desde su página oficial y a la hora de instalarlo nos ha llamado la atención esta opción:

Se trata de un complemento que nos permite monitorizar las temperaturas de nuestro PC desde el teléfono móvil, descargando la app Core Temp Monitor desde la tienda digital del sistema operativo. De esta manera, podremos hacer un seguimiento remoto si nos marchamos de cada y dejamos el ordenador encendido.

Una vez iniciada la aplicación,la ventana principal nos muestra el modelo de CPU, socket, litografía, voltaje, frecuencias… de todo. Si hacéis doble clic izquierdo podréis ampliar o reducir la información que se muestra. Por último, destacar la comprobación de actualizaciones de BIOS que ofrece.

Se trata de un programa que pesa poco, es liviano, muestra la información justa y necesaria, todo bien representado y, aunque sus opciones no son demasiadas, son suficientes para el menester que nos ocupa.

SolarWinds CPU Load Monitor

Valga por delante que es un software de pago con un trial de 14 días previo registro por parte del usuario. Pero es que es un software muy, muy completo. Y lo es porque no es un programa para leer la temperatura de tu procesador, sino un software que que se ocupa de todas las interfaces, buses y sensores de tu PC, pero… «esto ya lo hacen los demás», pensarás, y estás en lo cierto: la diferencia aquí es que lo que tenemos en frente es un administrador de tareas con monitorización y 60 utilidades más.

Esta cantidad de funciones se explica porque se usa en entornos profesionales para analizar cuándo un dispositivo, sea de red o no, tiene problemas de temperatura por sobrecarga y, por tanto, termina calentándose. El monitoreo de CPU es el más interesante que hemos visto, donde se pueden configurar alertas por temperatura con avisos al móvil, al correo, SMS y notificaciones en el escritorio.

Es posible establecer umbrales para las alertas y desentendernos del monitoreo completamente, lo que es ideal si pasamos un test de 8 horas o 24. Además, si tenemos un PC con dual socket podremos monitorizar de un vistazo y sin varias instancias ambos procesadores. Como decimos, todo en un entorno muy profesional ya que es una herramienta realmente pensada para administradores.

Temperatura de otros componentes del PC

HWMonitor

HWMonitor es una de las aplicaciones más completas que podemos encontrar, ya que nos ofrece la información de todos los componentes que forman nuestro PC. En mi opinión, es una de las primeras aplicaciones que descargo cuando he instalado Windows recientemente. Ofrece mucha precisión en los valores y hace un buen uso de los sensores de nuestros componentes.

Podéis descargarla desde su web oficial, es gratuita y muy sencilla de instalar. Podremos conocer toda la información de nuestros componentes: consumo, voltajes, cargas, porcentaje de uso, frecuencias, temperaturas (mínimas, actuales y máximas), espacio de disco duro e incluso la velocidad a la que trabajan los ventiladores.

La interfaz es simple y directa, no tiene menús de navegación extensos, ni nada por el estilo.

Con HWMonitor conocerás el estado de tu PC en tiempo real. De hecho, RivaTuner suele utilizar los datos proporcionados por HWMonitor para ver las temperaturas de nuestros componentes dentro de la partida. Una de las opciones más interesante es el hecho de poder registrar tanto los valores mínimos como máximos.

HWiNFO

En lo que a monitorización de temperaturas se refiere, HWiNFO es una opción súper interesante. Es gratuito y lo podéis descargar desde su página oficial. Fijaos que hay disponible una versión de 32 bits y otra de 64. Por otro lado, os recomendamos que os descarguéis la más estable siempre, para evitar posibles errores en la detección. Como ocurre con HWMonitor, HWiNFO sirve de fuente de datos para RivaTuner.

Nada más ejecutarlo veréis que escoge una distribución de ventanas en la que cada una muestra una información distinta. Naturalmente es posible cerrarlas así que quedaos con la ventana principal para navegar por las fichas de los distintos componentes

Sin embargo, yo os recomiendo dejar la ventana central abierta porque nos ofrece una información resumida muy útil. Igualmente, es posible cerrarla y navegar por los distintos componentes, de esta manera podremos averiguar cualquier pequeño detalle que altere el normal funcionamiento de nuestros componentes.

En mi opinión se trata de la aplicación que más información detallada ofrece. Muy recomendable para aquellos perfeccionistas que lo quieren tener todo siempre bajo control.

AIDA64 Extreme

Aunque no es conocida por su labor de monitorización, AIDA64 es otra de las mejores aplicaciones para medir la temperatura de tus componentes. Podéis descargarla a través de su web oficial. Eso sí, no es gratuita como el resto de alternativas que os hemos contado. El motivo es porque obtendremos un 2×1: software de monitorización y benchmark exigente al mismo tiempo. No cabe duda de que es una herramienta muy completa.

Es cierto que es la menos intuitiva de todas, debido a que es una aplicación con opciones muy extendidas; de hecho, es usada por profesionales. Encontramos las temperaturas que buscamos en su apartado sensor. Haciendo gala de la cantidad de detalles que ofrece, conocemos todas las temperaturas de nuestros componentes.

En este sentido la presentación de los valores nos recuerda a HWMonitor, aunque no sea igual al 100%. Es cierto que en algunos PC puede que no veamos ciertas temperaturas y eso, lógicamente, tiene un motivo y no es más que la capacidad que tiene el software para detectar el chip controlador de estos valores.

Normalmente los problemas pueden venir en ASUS y GIGABYTE, pero sobre todo en la primera.

Para que nos funcione correctamente todo tenemos qu:

1. Dirigirnos a Archivo.
2. Luego vete a Preferencias
   
3. Una vez en ese menú tenemos que dirigirnos al apartado que indica Estabilidad.
4. En él tenemos un montón de casillas de verificación que se encargan de activar la compatibilidad con diversos sensores de hardware y software externos o internos. Así que en este caso nos deberemos dirigir al que pone: Acceso al bus SMBus mediante ACPI (placas base ASUS).
5. Lo activamos y echamos un vistazo al resto de compatibilidades en los sensores.
6. Otra que normalmente no está marcada es la Compatibilidad con sensor térmico a DIMM. Este setting lo que nos permitirá será registrar en el menú de los sensores la temperatura de los módulos de la memoria RAM, siempre que estos tengan este sensor incluido, ya sea en placa o dentro de los propios módulos.

Dicho esto, tampoco hay que marcar como locos casillas porque sí, ya que podrían causarse problemas de estabilidad e incluso podría darse el caso de que AIDA64 no iniciase o diese un pantallazo azul, así que con marcar lo que sepamos que puede ser leído es más que suficiente.

NZXT Cam

La famosa marca de componentes para PC ofrece su propio software de monitorización. En un principio, estaba pensado para crear un ecosistema dentro de sus variados productos. No obstante, se trata de un software todo en uno muy interesante que ofrece opciones de monitorización y overclock. Podéis descargarlo gratuitamente desde su web oficial.

Sus opciones de monitorización son muy básicas pero ilustrativas. Podremos conocer la carga del procesador, su temperatura y la velocidad de su disipador, por ejemplo. En la memoria RAM solo conoceremos su consumo; en los discos duros, el espacio ocupado/libre, etc. Además, cuenta con una pequeña sección en la parte inferior que ilustra los procesos que más recursos consumen.

Para aquellos que no quieran disponer de un programa específico para todo, NZXT CAM puede ser una opción realmente buena.

Speccy

Para continuar con este recopilatorio de mejores aplicaciones para medir la temperatura del PC, os presentamos Speccy. Es una opción menos usada, pero que destaca por su sencillez. Aquí no obtendremos una información apabullante, sino que sabremos lo justo y necesario sobre nuestro ordenador: temperatura de discos duros, CPU, GPU y placa base.

De igual modo, nos sirve para conocer los diversos componentes que tenemos instalados. Tiene su versión gratuita y otra de pago, que sirven para versiones de 32 y 64 bits. Podéis descargar Speccy desde su página oficial.

Este programa funciona bastante bien, aunque tarda más de lo normal en detectar todos nuestros componentes. Llama bastante la atención, ya que su interfaz es básica y se trata de un programa liviano. Esto no es impedimento para que nos muestre una cantidad de datos abrumadora.

Dicho esto los expertos siempre suelen recurrir a HWiNFO o AIDA64 para obtener toda la información al detalle, relegando Speccy a un plano más personal que profesional.

Open Hardware Monitor

A pesar de que su desarrollo se quedó congelado, esta aplicación sigue siendo de las mejores para monitorizar la temperatura del PC. Tiene la particularidad de que cuenta con un gadget al más puro estilo Windows 7 que nos permite tener monitorizados los parámetros en todo momento.

Todavía se puede descargar de su web oficial, si bien es cierto que esta versión se ha quedado anticuada de cara al hardware moderno de nuestro PC actuales, por lo que a veces hay que buscar descargas alternativas de versiones Beta que sí funcionan con los componentes actuales.

Esperemos que esta lista de las mejores aplicaciones para medir la temperatura de vuestro PC os haya sido de utilidad.

El touchpad de los portátiles es el «ratón» integrado en estos, y normalmente consta de una superficie táctil y dos botones que hacen las veces de clic izquierdo y derecho. El hecho de que sea un panel táctil puede causar muchas molestias, ya que al escribir en el teclado podemos apoyarnos sobre él y hacer que se vuelva loco, y precisamente por estos dos motivos también es una parte de los portátiles con bastante tendencia a estropearse.

Qué hacer si el touchpad no funciona

Si el touchpad de tu portátil no funciona para nada, ni el panel táctil ni los botones, lo más probable es que o bien se haya desactivado o bien se haya estropeado completamente.

En el primer supuesto, lo primero que debes hacer es probar la combinación de teclas en tu portátil que activa y desactiva esta funcionalidad. Por norma general esto es con las teclas Fn + F9, pero depende de la marca y el modelo de tu portátil podría estar en otra combinación de teclas o incluso contar con un botón dedicado para ello. Busca el icono que te mostramos en la siguiente imagen y prueba a activarlo y desactivarlo para ver si vuelve a la vida, ya que quizá lo desactivaste sin querer.

Es también posible que hayas desactivado el touchpad en las opciones de Windows, o que en el software de tu portátil (o en las opciones del ratón) tengas seleccionado que si se detecta un ratón USB externo, se desactive el touchpad del portátil. Para comprobar esto último simplemente desconecta cualquier ratón que tengas conectado al equipo, y para comprobar lo primero puedes verlo en las opciones del ratón de Windows.

Hay otras dos comprobaciones adicionales que puedes realizar si el touchpad no funciona. La primera es comprobar que no tienes deshabilitado el dispositivo en Windows (o que tiene correctamente sus drivers, si bien en la enorme mayoría de casos vienen de serie con el sistema operativo), y para ello haz clic sobre el botón de Inicio y selecciona Administrador de Dispositivos. Bajo la categoría «Dispositivos de interfaz de usuario (HID)», comprueba que no esté deshabilitado (y si lo está, haz clic derecho y dale a Habilitar) o que no aparezca con un aspa roja indicándote que no tiene drivers (en cuyo caso haz clic derecho y selecciona Actualizar controlador).

Finalmente, si el touchpad no funciona puede ser que esté deshabilitado en la BIOS del portátil. Para comprobarlo, nada más encender el equipo pulsa repetidamente la tecla SUPR, F2 o F10 dependiendo de tu portátil para acceder a la BIOS, y en el menú Advanced encontrarás la opción «Internal Pointing Device». Comprueba que no esté deshabilitado.

Si nada de esto ha hecho que el touchpad vuelva a funcionar, es probable que esté físicamente estropeado y tengas que llevarlo a reparar.

Qué hacer si el touchpad se «vuelve loco»

Un problema bastante frecuente de los touchpad de los portátiles es que tengan un comportamiento que no es el esperado, o dicho de una manera coloquial, que se vuelvan locos. Por ejemplo, al poner el dedo sobre la superficie táctil el cursor en la pantalla comenzará a moverse de un lado a otro de manera errática, o incluso que sin ni siquiera tocar el touchpad el cursor se mueva por sí solo.

Hay dos potenciales motivos por los que el touchpad pueda estar fallando de esta manera, y ambos son físicos. El primer motivo es que haya algo «suelto» internamente o que no esté bien conectado, y la manera de verlo lamentablemente es abriendo el portátil para acceder al componente y poder revisarlo, así que lo que te aconsejamos es que lo lleves a un servicio de reparación o que, si lo haces, seas consciente de que estás anulando la garantía (si la tuviera) y que podrías romper algo. Hazlo bajo tu responsabilidad.

El segundo potencial motivo es por mera suciedad. Aunque tengamos las manos limpias, la piel humana siempre tiene una especie de «grasilla» que se va adhiriendo a las superficies que tocamos, y al final en el touchpad se produce una buena acumulación de ésta en la que, a su vez, se queda pegado el polvo y la porquería en general, pudiendo producir este comportamiento no deseado en el dispositivo.

Lo mejor que puedes hacer es utilizar un paño de microfibra seco y alcohol isopropílico (no utilices alcohol sanitario para esto porque podrías estropear el dispositivo) y, mojando un poco el paño pero sin que llegue a rezumar líquido, limpiar insistentemente toda la superficie del touchpad, haciendo especial hincapié en las esquinas y rebordes que es donde más se acumula la suciedad.

Nuevamente, si con esto no consigues arreglarlo lo mejor es llevarlo a un servicio técnico, si bien es cierto que si tu touchpad no funciona siempre puedes prescindir de él utilizando un ratón USB.

FUENTE: HARDZONE